jueves, 15 de enero de 2015

VERGONZOSA MANIPULACIÓN DE ESTADO EN NOMBRE DE LA UNIDAD NACIONAL

Millones de personas se manifestaron en toda Francia el 11 de Enero en reacción al ataque de Charlie Hebdo y la toma de rehenes. La mayor parte se manifestó por la libertad de expresión, contra el antisemitismo y todas las formas de racismo. Por las luchas y aspiraciones compartidas, como la indignación, la tristeza y la rabia, pero con sentimientos también contradictorios. Lo hicieron también como reacción espontánea a una temible espiral de violencia.

El NPA había decidido no unirse a la “marcha republicana” de París para no participar de la instrumentalización y de la manipulación orquestadas por Hollande y Valls en nombre de la “unidad nacional” que ha sido construida para tratar de hacer creer a los franceses en los intereses comunes de los de arriba y de quienes sufren su política. “París, capital del mundo” exclamó el presidente de la República en su recibimiento a los jefes de estado, los mismos que ante otras masacres no se unieron ante los medios.

Todas las “sanguijuelas del mundo” se habían dado cita para manifestarse. Así, al lado de Hollande, Valls y Sarkozy, estaban presentes Netanyahu, el fascista Orban y el representante de Putin que encarcela y asesina a periodistas, dictadores africanos, los primeros ministros británico, español, italiano y griego, los campeones de la austeridad y de las políticas racistas, los mejores defensores de la troika y de la OTAN. ¿Es que no son ellos mismos terroristas? De Siria a Irak, de Libia a Mali, su coalición produce el terrorismo que dice combatir.

Para el NPA y la izquierda anticapitalista, la lucha por la libertad de expresión y los derechos democráticos y contra todo tipo de racismo es indisociable de la lucha contra la islamofobia y el antisemitismo, contra las leyes represivas, contra la política del gobierno, las medidas económicas antisociales de los gobiernos y las intervenciones militares imperialistas. Continuamos este combate que se va a intensificar y no podemos ir de la mano de este gobierno. 
 
Es urgente dar un nuevo impulso a las movilizaciones antifascistas y antirracistas. Más allá de lo siniestro de compartir lemas Hollande y Marine Le Pen, a nadie se le esconde que es el Frente Nacional, los islamófobos y antisemitas los que salen reforzado. La “unidad nacional” es una trampa que halaga los prejuicios chovinistas y xenófobos contra las aspiraciones de la gran mayoría trabajadora que salió a las calles. Trata de imponer unas políticas al servicio de la gran patronal y los bancos. 
 
La carrera de velocidad entre la catástrofe social y política producida por la lucha de clases librada por los capitalistas y la capacidad de resistencia de los explotados, se ha acelerado brutalmente. Es por eso que las y los revolucionarios tendremos que tomar la iniciativa. Es urgente que los asalariados, los jóvenes, las clases populares, se expresen de forma independiente de quienes dirigen una guerra social e imperialista contra el conjunto de los trabajadores y los pueblos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario