lunes, 26 de diciembre de 2011

Izquierda Anticapitalista ante la investidura de Rajoy.


Viernes 23 de diciembre de 2011,

Declaración de Izquierda Anticapitalista

El nuevo presidente del gobierno habla de que su mandato será el de las “grandes reformas”, no para abordar la situación del corto plazo, sino pensando en “lo que necesitará España en los próximos 20 años”. Pues bien, lo que está en juego en esta legislatura son las conquistas sociales y democráticas conseguidas con sangre, sudor y lágrimas por varias generaciones. Si el gobierno anterior defendió sin titubeos los intereses del gran capital, el que preside Rajoy lo es del capital mismo (no en vano el flamante Ministro de Economía, Luis de Guindos, fue presidente de Lehman Brothers en España y Portugal en el momento del estallido financiero), y se propone salvar los grandes negocios y los intereses de las oligarquías aunque sea a costa de hundir a una parte creciente de la población en la miseria y la desesperación, siguiendo la estela de Grecia, Portugal o Irlanda.

El discurso de investidura de Rajoy y el nombramiento del nuevo Ejecutivo empiezan a dar pistas sobre las medidas de saqueo contra los y las trabajadoras que aplicará para rescatar a banqueros y especuladores y para seguir transfiriendo sumas millonarias a los brokers internacionales, quienes imponen su dictadura por doquier después de haber precipitado la crisis actual con sus actuaciones criminales.

Al igual que Esperanza Aguirre en la Comunidad de Madrid o Artur Mas en Catalunya, Rajoy se propone ahorrar 16.500 millones de euros recortando drásticamente salarios y empleos en la Administración, degradando brutalmente y privatizando los servicios públicos esenciales, subiendo los impuestos indirectos que más perjudican a los sectores populares (pero regalando nuevas exenciones fiscales y sociales a la patronal), suprimiendo ayudas y subvenciones, subiendo las tarifas eléctricas, operando una recentralización del Estado sin olvidar sus planes reaccionarios en el terreno de la familia y la sexualidad… Es decir, que el gobierno va a imponer a través del Estado un trasvase global de renta sin precedentes entre trabajo y capital y una pérdida brutal de poder adquisitivo de las clases populares y de un sector nada despreciable de las capas medias. Desde luego, no ha habido ni una palabra en el discurso de investidura de Rajoy sobre la persecución del fraude fiscal récord que registra el Estado español o sobre una fiscalidad más redistributiva, medidas que reducirían el déficit público y permitirían financiar mejor las políticas públicas.

Grandes ejes de gobierno

En primer lugar, se plantea aprobar una ley de estabilidad presupuestaria que complemente la reciente reforma constitucional, una reforma que ilegaliza de facto las políticas públicas redistributivas.

El segundo eje será una nueva oleada de fusiones bancarias y de subvenciones a la mafia financiera, algo que según Rajoy permitirá la recuperación del crédito, pero que no hará otra cosa que ahondar las lógicas especulativas y seguir asfixiando a particulares y pequeñas y medianas empresas productivas.

En la Administración pública el PP va a combinar supresión de empleos, recentralización del Estado, privatización de servicios y venta de patrimonio público. Quizás una de las primeras víctimas de la privatización sean las televisiones públicas de ámbito estatal y autonómico.

En materia socio-laboral, el nuevo gobierno pretende reformar el calendario laboral para trabajar más por menos (suprimiendo puentes), suprimir las prejubilaciones (para convertirlas en despidos puros y duros) y convertir el empleo estable que queda en empleo precario. La única receta para reducir el paro será destruir empleo de calidad y universalizar el empleo basura, dinamitando así el modelo de relaciones laborales en torno al cual se reconstruyó el movimiento obrero bajo la dictadura: los convenios colectivos. No hay la menor duda de que Rajoy intentará aprobar una reforma laboral que degrade radicalmente las condiciones contractuales de los y las trabajadoras en los sectores que todavía conservan un grado importante de afiliación sindical, que imponga el despido libre y un nuevo contrato único que universalice la precariedad laboral.

Por otro lado, en consonancia con otras políticas regresivas que se están aplicando en Europa, va a perseguir las bajas laborales, incluso por enfermedad, con métodos represivos.

(contra)Reforma de la sanidad y la educación

La ambigüedad de las declaraciones de Rajoy no puede esconder que las reformas en este ámbito supondrán una privatización y una degradación de los servicios. Lo más probable es que, en lo que a la salud se refiere, Rajoy generalice el saqueo perpetrado por CiU en Catalunya –re-pago, recargos sobre los medicamentos, cierre de centros de asistencia, privatización galopante, venta de patrimonio público, etc...- y que en Educación siga la estela de Esperanza Aguirre: deslavazar la enseñanza pública (destinada exclusivamente a estudiantes de origen popular) para subvencionar masivamente a la privada y concertada, a menudo religiosa y coto reservado de los hijos e hijas de la burguesía y de sus servidores.

Contradicciones del nuevo gobierno PP

Si bien es cierto que el gobierno disfrutará de una cómoda mayoría parlamentaria, de apoyos parlamentarios sólidos más allá de sus filas para las medidas más duras e impopulares y de firmes aliados en la patronal y el aparato de Estado, los medios de comunicación y la sociedad civil, va a tener que gestionar una situación socioeconómica muy volátil y potencialmente explosiva y se va a topar con no pocas contradicciones y riesgos.

En primer lugar hay que decir que la victoria de las derechas no ha reducido la incerteza económica. No se calman los ataques especulativos ni se recupera la “confianza”, que dicen los neoliberales. Por otro lado, cuanto más se recorte el PP, más recortes exigirán los “mercados”. El círculo infernal de la deuda funciona así, lo cual puede ir generando un nivel de frustración y exasperación social creciente, ya que es imposible que se reduzca el paro con estas políticas, sino todo lo contrario. Además, el PP no contará con ninguna medida estrella para legitimar su mandato, como la tuvo Zapatero con la retirada de las tropas de Irak.

Es más, como puso de manifiesto su discurso de investidura, en el que no hubo referencia alguna a ETA y al conflicto vasco, Rajoy tampoco lo tendrá fácil para cohesionar a su base social. El españolismo que destiló, las referencias a la recentralización del Estado y la firmeza antiterrorista tampoco funcionarán a medio plazo, cuando tenga que gestionar la salida al conflicto vasco. Al contrario, más bien generará contradicciones internas a su base social y tensiones entre el PP y la caverna mediática.

Pero lo que más problemas puede crear al PP y lo que erosionará más al gobierno será una resistencia social de masas a la política de choque ultraliberal que se dispone a aplicar, es decir, un segundo aliento del movimiento del 15M unido a un despertar del mundo del trabajo. Sólo una removilización masiva de los sectores populares y de unas capas medias cada vez más depauperadas y precarizadas podrá detener el Tsunami antisocial y antidemocrático que están orquestando en la Moncloa.

Nuestras tareas políticas: organizar la resistencia

La nueva situación abierta tras las autonómicas y municipales y las generales, con un poder de las derechas en casi todos los niveles de la Administración sin precedentes desde la dictadura, generará un estado de ánimo muy negativo entre los sectores populares. Sin embargo, la capacidad de resistencia que ha demostrado el 15M está intacta a pesar del relativo reflujo que se ha conocido en los últimos meses. No es descartable que los nuevos ataques reestimulen las luchas. Sin embargo, el panorama es más sombrío en lo que respecta al sindicalismo mayoritario, todavía embarcado en la política de concertación iniciada con el pacto de las pensiones y la consiguiente traición de los objetivos de la huelga general del 29S, un sindicalismo cuyos aparatos están directamente amenazados en caso de tomar iniciativas de movilización contra el nuevo gobierno.

Aquí las tareas de la izquierda anticapitalista serán intervenir a fondo en los procesos de lucha, coordinación y organización de las resistencias y lanzar campañas políticas centrales en torno a los grandes temas de la situación política, con una atención especial a la cuestión de la deuda pública y su no pago. También habrá que reflexionar sobre nuevas formas de acción capaces de paralizar la producción, más allá de las huelgas generales más tradicionales: cortes de vías, bloqueos, etc… siempre con la perspectiva de luchar por una huelga general desde abajo que desborde las jornadas de acción de un solo día promovidas por el sindicalismo de concertación desde la transición.

23 de diciembre de 2011 www.anticapitalistas.org

Egipto: Tras las elecciones, la represión.

Viernes 23 de diciembre de 2011,

A L’encontre

Desde el viernes 16 de diciembre de 2011, las fuerzas policiales militarizadas, la policía antidisturbios y matones a su servicio han lanzado una amplia operación represiva contra los manifestantes que organizaban un campamento –utilizando la fórmula “Ocupa la sede del gobierno”- para protestar contra el nombramiento por el Consejo Superior de las Fuerzas Armadas (CSFA) del primer ministro de transición Kamal el-Ganzuri. Este último había ocupado ya ese puesto con Hosni Mubarak. Los manifestantes reclamaban igualmente la dimisión del CSFA, apuntando en particular al jefe del ejército y, de hecho, jefe del estado: el mariscal Hussein Tantaui.

Con fecha del martes 20 de diciembre de 2011, el periódico Ahram Online indicaba que el número de personas muertas se elevaba a 14, al menos 9 por disparos, y el de heridos graves a más de 800. En un artículo publicado en la página web Jadaliyya, con fecha 17 de diciembre de 2011, titulado “Urbanizing the Counter-Revolution”, Mohamed Elshahed pasa revista a las iniciativas contrarrevolucionarias del poder militar en El Cairo y sus alrededores. Indica que el miércoles 14 de diciembre, decenas de manifestantes del campamento situado frente a los edificios gubernamentales y del parlamento habían sido envenenados con ocasión de una distribución de bocadillos por un “generoso donante”. Poner fin a esta ocupación, que había comenzado el 25 de noviembre, formaba parte de los planes del CSFA.

Lo que los medios, por una especie de reflejo pauloviano, califican de “ciclo de violencia” estalla en medio de un proceso electoral presentado como el verdadero “test de la transición democrática” tras la caída de Mubarak.

Algunos días antes del comienzo de la primera fase de las elecciones legislativas, las llamadas fuerzas del orden habían atacado, el 18 de noviembre, a los manifestantes en la plaza Tahrir, y también a quienes denunciaban el poder militar y exigían su partida en Alejandría y Suez. Balance: 42 muertos y unos 2000 heridos. El mariscal Tantaui, que tiene aprendida las lección sobre la comunicación en período de “transición democrática”, se excusó en los canales de la televisión pública.

“Los hijos de Mubarak”

Frente al desencadenamiento de esta nueva ola represiva, en una declaración fechada el 17 de diciembre de 2011, la organización de los Socialistas Revolucionarios de Egipto explicaba: “Los dirigentes del CSFA son los hijos de Mubarak y son leales a sus propios intereses económicos. Los generales del CSFA controlan alrededor del 20% de la economía y están absolutamente opuestos a los intereses de millones de trabajadores y trabajadoras que tienen dificultades para asegurar su subsistencia. La mayoría de ellos no puede encontrar un empleo que les posibilite una vida decente o simplementer la esperanza mejorar de su vida”.

La declaración subraya que la campaña de prensa del poder para justificar su ofensiva contra el campamento, insistía en el descontento de los habitantes del barrio y en los pretendidos problemas provocados por los “contestatarios”. Sin embargo, este campamento estaba instalado en una zona en la que se encuentra esencialmente edificios gubernamentales, ministerios y embajadas. No es por tanto un barrio residencial.

Luego, la declaración de los Socialistas Revolucionarios subraya que “estos acontecimientos son la respuesta a un ascenso de las protestas obreras y al anuncio hecho por numerosas organizaciones de trabajadores de proseguir las manifestaciones y ocupaciones a fin de poner en marcha las tareas revolucionarias de redistribución de la riqueza en la sociedad y de limpieza de los vestigios del régimen de Mubarak presentes en las instituciones públicas. Esta es la razón por la que las fuerzas armadas necesitaban destruir el campamento, a fin de obstaculizar la posibilidad de una unión entre las masas trabajadoras y los revolucionarios que organizan el campamento cerca de los edificios gubernamentales. Estos acontecimientos se desarrollan cuando las elecciones legislativas se aproximan a su fin (es decir,a la 3ª fase de comienzos de enero de 2012) y que, como consecuencia, van a afirmarse las reivindicaciones de que el ejército vuelva a los cuarteles y que se ponga en pie gobierno elegido. Todo esto acentúa la tendencia en el seno del ejército a crear caos y pánico, a fin de que los generales puedan justificar que cogen las riendas del poder debido a una exigencia popular; o bien que aplasten a los revolucionarios para que las posiciones políticas y de poder puedan ser repartidas entre las fuerzas políticas oportunistas que acepten implicarse en la batalla del papel y la función del parlamento según las reglas definidas por los militares. No existe por tanto otra solución que proseguir el proceso revolucionario en las plazas públicas, en las universidades y en los lugares de trabajo. No hay sustituto a la perspectiva de intentar ganar a las masas populares, principalmente a la clase obrera, al campo de la revolución. Si no lo hacemos, las Fuerzas de Ocupación (es decir el ejército y el CSFA), bajo la dirección de Tantaui, continuarán matando revolucionarios y haciendo fracasar la revolución”.

La propaganda oficial derrotada

El lunes 19 de diciembre, el CSFA organizó una conferencia de prensa. El ministro de defensa y miembro del CSFA, Adel Emara, calificó a los soldados que habían atacado el campamento como “héroes” (Ahram Online, 19 de diciembre de 2011). Negó toda utilización “excesiva de la fuerza” por las fuerzas de policía militarizadas. En la tradición del régimen de Mubarak, sugirió que una “tercera fuerza” suscitaba el caos. Esto último remite a veces a “fuerzas extranjeras” o a “elementos que tendrían lazos con el antiguo régimen”. Adel Emara no carece de cinismo.

La campaña de contrainformación de los militares se enfrenta con los desmentidos producidos por numerosos videos y pruebas fotográficas de la brutalidad represiva. El 20 de diciembre, era celebrada una conferencia de prensa por numerosas fuerzas políticas (Ahram Online, 20 de diciembre de 2011). Desmontaba pieza a pieza la versión oficial detallando el abanico de torturas, arrestos, palizas y asesinatos, apoyándose en videos, fotografías y testimonios. Un gran número de periodistas y cadenas de televisión asistían a esta conferencia de prensa, lo que es un índice de la inestabilidad de la situación.

En esta ocasión, el jurista Malek Adly explicó que numerosas personas detenidas “eran golpeadas tan gravemente que eran incapaces de moverse”, que Mohamed Mohey había muerto en una celda de la cárcel tras las heridas sufridas. Malek Adly añadió que “cuando los policías investigadores aceptaron finalmente que 29 detenidos que se encontraban en un estado grave fueran llevados a un hospital, los oficiales responsables del puesto de policía impidieron a tres ambulancias transportarlos. Los oficiales les llevaron a un hospital utilizando un vehículo de las fuerzas centrales de seguridad”. Un médico de nombre Amr Salah, que cuidaba heridos en la plaza Tahrir, explicó que, el sábado 17 de diciembre, algunos militares habían intentado destruir un centro de primeros auxilios. Impedían a la gente acceder al centro establecido en la mezquita Omar Makram. Él mismo fue violentamente golpeado. Conocía muy bien al estudiante de medicina Alaa Abdel-Hady que había sido muerto por bala el viernes 16 de diciembre, cuando el campamento fue atacado.

Un periodista del periódico independiente El-Badil hizo un relato detallado de la forma en que los militares le impidieron partir con la joven que se encontraba en el suelo después de haber sido desnudada, golpeada y arrastrada por la policía militarizada. Un acto represivo cuya fotografía se ha convertido en uno de los símbolos de la práctica del poder militar. En un artículo de Salma Shukrallah (Ahram Online, 20 de diciembre de 2011), se cuenta que la imagen de esta mujer golpeada y arrastrada por tres militares se convirtió en un elemento simbólico que suscitó una protesta masiva contra las múltiples humillaciones (“test de virginidad”, violencias sexuales, golpes) infligidos a las mujeres. Así, el martes 20 de diciembre, unas 10.000 mujeres se manifestaron de la plaza Tahrir hacia el centro de prensa. Salma Shkrallah escribe: “Algunas manifestantes llevaban el pañuelo, otras no, algunas llevaban el niqab. Mujeres cristianas coptas participaban en la manifestación, llevando el retrato de Mina Danial, la militante copta que había sido asesinada a balazos cuando el ataque de los militares contra una manifestación de coptos en octubre (el 9 de octubre, 26 manifestantes encontraron allí la muerte). Otros manifestantes llevaban banderas egipcias en las que se entrelazaban los símbolos de la media luna y de la cruz… Numerosas madres participaban en la manifestación con sus hijas. Se gritaban consignas como ’No os asustéis’, ’El CFSA debe irse’, ’Queremos un estado civil’, ’Abajo el régimen militar’”. Esta amplia manifestación, organizada muy rápidamente, representa la más importante movilización de mujeres en Egipto, desde hace mucho tiempo.

Los medios occidentales, en particular los franceses, han puesto el acento en el incendio del Instituto de Egipto, fundado por Napoleón Bonaparte. Todo daba a entender, como quería el poder egipcio, que el Instituto había sido incendiado por los manifestantes del campamento. El semanario Al-Ahram Hebdo (21-27 de diciembre de 2011) escribe: “Según una periodista de Al-Ahram Hebdo, que estaba allí durante los acontecimientos, las manifestaciones estaban concentradas alrededor del recinto del Consejo de Ministros en el momento en que el incendio comenzaba en el Instituto de Egipto. Relata que jóvenes manifestantes han intentado salvar volúmenes que entregaban a continuación a las autoridades”. Otros testimonios subrayan la presencia de una estación de bomberos cercana al Instituto, que no ha intervenido. El artículo de Al-Ahram Hebdo continúa: “Muchos han denunciado la ’hipocresía’ de los oficiales que se lamentan sobre las ruinas del edificio destruido pero que olvidaban la sangre de los egipcios muertos violentamente”. El autor del artículo, May Atta, cita al profesor de letras de la Universidad de El Cairo Madiha Doss que afirma: “¿Sabe (Ganzuri) cuales eran las condiciones de mantenimiento de ese instituto hoy erigido en patrimonio nacional? ¿Quién se ha interesado por este edificio en los últimos decenios? Ganzuri estaba al corriente de la negligencia y del saqueo sistemático que sufría el Instituto”

El test de la marcha del 23 de diciembre

La ola represiva emprendida bajo los auspicios del CSFA suscita un malestar, incluso en el seno de fuerzas dispuestas a aceptar un compromiso con los intereses de los militares en ejercicio y de los militares jubilados activos en el “mundo de los negocios”.

La utilización propagandística del gastado tema de la intervención de una “fuerza extranjera” queriendo desestabilizar la transición se ha atascado. Este episodio represivo se inscribe en la voluntad, y los actos, de los dignatarios del ejército y sus próximos aliados, desde comienzos de marzo, de controlar todo proceso que pueda escapárseles de las manos.

Más de 20 organizaciones políticas y culturales han lanzado un llamamiento el lunes 19 de diciembre para “una marcha del millón” fijada para el viernes 23 de diciembre. El llamamiento se hace sobre un tema reivindicativo unificador: “Abajo el régimen militar”. La declaración subraya que la manifestación del viernes tiene por objetivo “reconquistar el honor de la nación que ha sido manchado por el CSFA” tras la partida obligada del presidente Hosni Mubarak.

La preparación de esta movilización parece tomar amplitud en ciertas universidades. La marcha de las mujeres el 20 de diciembre es otro indicador de una voluntad de reacción de un sector de la población, de rechazo de los diktats militares y de las prácticas de las fuerzas represivas. Igualmente, la puesta en cuestión de la inacción del Tribunal Supremo aumenta: este último protege a los pocos militares designados como responsables de crímenes.

El asesinato del cheikh Emad Effat (Al-Masry Al-Youm, 19 de diciembre de 2011), una figura de la Universidad de Al-Azhar, que apoyaba a los manifestantes de la plaza Tahrir, ha aclarado, bajo otro ángulo, la política del poder. Era una de las raras figuras de Al-Azhar que apoyaba el movimiento de protesta contra la junta militar de facto. Sus funerales el domingo 18 de diciembre han sido muy concurridos. Esto puede constituir otro factor de amplificación de la manifestación prevista para el viernes 23 de diciembre. Esta última aparece pues como un nuevo test de la coyuntura política y social de Egipto

21/12/2011

http://alencontre.org/moyenorient/e...

Traducción: Faustino Eguberri para VIENTO SUR.

martes, 20 de diciembre de 2011

Las crisis de las Deudas, los Recortes del PP, el Tratado del Euro y otras cuestiones de la lucha de clases


Lunes 19 de diciembre de 2011,

Articulo de Dani Albarracin

El pasado jueves 14 de Diciembre Izquierda Anticapitalista de Aragón invitó a Daniel Albarracín a introducir un debate sobre las crisis de las deudas, enmarcando las políticas de recorte del PP y el Tratado del Euro como ejes del nuevo contexto económico y político. Albarracín acaba señalando la necesidad de levantar campañas como el de una Auditoría Ciudadana de las Deudas explicando sus motivos y objetivos. La intervención se celebró en la Facultad de Ciencias Económicas de Zaragoza.

Entre otras cuestiones el autor se pregunta sobre el para qué de los recortes del PP, afirmando cosas tales como :

• El objetivo número uno del nuevo gobierno es pagar religiosamente la deuda. Los recortes pueden tener una envergadura que multipliquen por tres los del PSOE. ¿Quizá se impongan la mayoría de las medidas al comienzo de la legislatura?.

• Los capítulos que previsiblemente tocarán son:

a) Reforma Mercado de Trabajo.

b) Prestaciones de Desempleo

c) Reducción servicios públicos o de su calidad (educación, sanidad).

d) Aumento del IVA, unificando todos los tipos. Recuperación de deducciones fiscales por vivienda, moderación impuestos sobre beneficios, etc…

Pero:

• El volumen de endeudamiento es extraordinariamente mayor que los enormes recortes anunciados. El déficit exterior es brutal, más aún la deuda global, que sobre todo es achacable a la deuda privada de las empresas. ¿Para qué sacrificar tanto a la población si ni de lejos se podrá hacer frente a la deuda acumulada?.

• El modelo de la UE y sus nuevos pactos, sin contrapesos al mercado ni medidas de impulso alguno, aumentará el endeudamiento exterior de los países periféricos.

• Además, los rescates bancarios y el Banco Malo que va a montar el PP, con recursos públicos para sanear las cuentas bancarias, incrementarán brutalmente la deuda pública.

• Las políticas de estabilidad presupuestaria son profundamente depresivas y agudizarán el problema de endeudamiento.

En suma, la deuda ni se ha de pagar ni se puede pagar.

Entonces, ¿para qué estos recortes?, puesto todo apunta a los siguientes objetivos:
- Para someter a la población mediante el paro (y obligarla a aceptar cualquier empleo), a la deuda del Estado y de su propia deuda familiar.
- Para blindar a las oligarquías financieras y las grandes compañías industriales y energéticas
- Para elevar la tasa de explotación y aumentar la tasa de rentabilidad, en un contexto de crisis estructural y decadencia capitalista.

También interpreta algunos contenidos del próximo Tratado del Euro, que delimitarán la situación depresiva de los próximos años.

Puede escuchar el audio completo, donde se profundiza en diversos aspectos más allá de lo aquí expuesto, aquí

Irlanda. Es oficial: La austeridad no está funcionando

Esquerda.net

Las estimaciones del Libro Blanco del Ministerio de Finanzas irlandés para los Presupuestos de 2012 convierten su lectura en desagradable. Lo que muestran es que, en las previsiones del mismo gobierno, la política de imposición de la “austeridad” es un fracaso. Artículo de Michael Burke.

Según las proyecciones, los ingresos son efectivamente irrisorios, 39.9 mil millones de euros en 2012, en comparación con 39,2 mil millones de euros en 2011. Los ingresos corrientes (principalmente fiscales) aumentarán en apenas un 1,7%. Teniendo en cuenta que este porcentaje se encuentra próximo a la tasa de inflación que, probablemente, se verificará, eso significa que las previsiones oficiales no esperan, en total, un aumento real de los ingresos.

La situación es aún peor en términos de gastos. El gasto total caerá a los 61,5 mil millones de euros, frente a los 64,4 mil millones registrados en 2011. Sin embargo, este descenso de 3 mil millones de euros es mayor del explicado por el descenso proyectado de 6,3 mil millones de euros en gastos de capital para socorrer bancos fallidos (aunque, a pesar de repetidas promesas, aún serán necesarios nuevos fondos de rescate de 1,3 mil millones de euros en 2012, sobre 3,1 mil millones de euros en la emisión de garantías bancarias).

Esas estimaciones, de hecho el propio nombre Exchequer, son una reliquia de la historia colonial creada para dar cuenta de cuanto Gran Bretaña fue gentilmente concediendo préstamos a este país (sin incluir del todo los saqueos del sector privado, que eran el objetivo del proyecto). Un proceso semejante ocurre aún en el Norte de esta isla y es una señal de cuán poco las perspectivas oficiales cambiaron aquí en los últimos 90 años en que aún son usadas.

En de vez de eso, la UE insiste en la necesidad de una definición del Saldo de la Administración Pública (SAP) que, en realidad, incluya todos los aspectos de las finanzas públicas, no esas “estimaciones”, que tienen en cuenta apenas una parte de los gastos y del rendimiento del gobierno central. En particular, incluye, al contrario que las estimaciones, los pagos e ingresos del Fondo de Seguridad Social, el Fondo Nacional de Pensiones, las administraciones locales y otros elementos. El resultado proyectado para las finanzas del gobierno según el índice SAP es divulgado abajo. El déficit en el SAP aumenta en 2012. Esto después de ser retirados de la economía 6 mil millones de euros mediante el ajuste fiscal introducido en los Presupuestos del año pasado, y de la introducción de un impuesto totalmente nuevo (y regresivo) bajo la forma de tasa social universal. El veredicto es claro: el déficit está subiendo, no cayendo. El déficit como proporción del PIB deberá estabilizarse, pero apenas debido a una previsión de crecimiento que puede, o no, concretarse.

Por tanto, cuando los ministros del gobierno de cualquier partido afirmen confiadamente a lo largo de los próximos días que sus medidas presupuestarias van a traducirse en la reducción del déficit, la primera pregunta debe ser, ¿por qué van a funcionar estas medidas cuando todas las medidas anteriores fracasaron?

Tal vez la segunda pregunta deba ser, si todos los recortes masivos que causaron recesión, desempleo, inmigración, pobreza y miseria no producen comprobadamente reducción del déficit, ¿hay realmente otro objetivo, no declarado, de esta política?

Michael Löwy: «El socialismo y la ecología son necesarios para construir una sociedad más justa y duradera»


Lunes 19 de diciembre de 2011,

Entrevista a Michael Löwy, pensador marxista y promotor del ecosocialismo El Triangle

Nacido en Sao Paulo, pero instalado en París, es autor de una veintena de obras, muchas de ellas vinculadas a la sociología. Afirma que la crisis ecológica es más importante que la económica.

¿Cómo valora la crisis actual?

Es la más grave desde el crack del 29, lo que demuestra la irracionalidad del sistema y de las supuestas medidas para contenerla. Si en los años treinta Franklin D. Roosevelt afrontó la crisis con el New Deal, y efectivamente funcionó para crear puestos de trabajo mediante la mejora de la salud, la educación, la cultura y la ayuda a los sindicatos, ahora esto no se produce. Ante la lógica de la religión neoliberal, se nos propone como alternativa salvar a los bancos, los grandes responsables de la crisis, mientras quien paga los costes son las trabajadoras y trabajadores a fuerza de recortar los salarios, las pensiones, la educación, la salud y otros puntales del Estado del bienestar.

¿Nos encontramos a las puertas del fin del capitalismo?

Discrepo, éste siempre ha encontrado maneras de escaparse, incluso con la guerra o el fascismo, como sucedió en los años treinta en Europa. Hemos de recordar al filósofo Walter Benjamin, cuando en la postguerra, tras vivir la crisis del 29 y los posteriores episodios en Alemania, apuntó: «Nuestra generación ha aprendido una lección: el capitalismo nunca morirá de muerte natural. Tan solo lo hará cuando exista una acción colectiva que nos lleve hacia una nueva forma de vida».

Con la extensión global de este modelo predador, ¿la situación es más preocupante?

Lo único cierto es que tenemos una democracia de baja intensidad, y la elección de tecnócratas en Italia y en Grecia lo demuestra. Están en manos del Banco Central Europeo y de los inversores de Goldman Sachs. Insisto, sin embargo, en las palabras de Benjamin, quien asegura que el capitalismo tiende a salvarse, aunque para que esto suceda sea la gente quien pague las consecuencias.

¿Qué alcance tendrá la recesión económica?

Más importante que la crisis económica, es la ecológica, resultado de la expansión infinita del modelo productivista y de consumo. El capitalismo sin expansión es como un cocodrilo vegetariano, incompatible. Esto nos lleva a un desastre ambiental que ya se manifiesta en el aumento de la contaminación del agua, del aire y, como expresión más profunda, en el calentamiento global, que nos puede conducir a una catástrofe humana sin precedentes.

¿A qué nivel?

Esa máxima según la cual «tenemos una responsabilidad con las generaciones que todavía no han nacido» ya no es así. La catástrofe ha comenzado y afectará a la generación actual de jóvenes. Extertos científicos de la NASA, como James Hansen, han pronosticado que, en sólo diez aaños, el proceso será irreversible y, cuando el planeta supere en dos grados su temperatura, nos dirigiremos hacia la desertificación. Se prevé que el desierto del Sáhara puede llegar hasta las puertas de Roma, con la consecuente desaparición del agua potable a medio plazo.

¿Será, la lucha por los recursos, el motivo de los conflictos bélicos?

Todo pivotará en torno a estas demandas. Sin olvidar los efectos de elevación del nivel del mar por la fosa de los polos Antártico y de Groenlandia. También ha llegado antes de lo previsto y, si sube más de un metro, se calcula que las principales ciudades del planeta, como Nueva York, Londres, Barcelona o Hong Kong, quedarán anegadas. Nos acercamos a esta situación sin que los gobiernos neoliberales tomen las medidas adecuadas para ponerle freno.

Con el fin del petróleo, ¿qué puede pasar?

Provocará que el capitalismo se disponga a extraer los fósiles más inaccesibles. Ya existen operaciones para obtenerlos en áreas de Canadá o en alta mar que provocan la emisión de gases contaminantes o el vertimiento de una gran cantidad de aceite al agua. Y luego está el carbón, la extracción del cual todavía tiene mucho recorrido. Desgraciadamente, ningún país instalado en la lógica productivista quiere renunciar a él.

La Conferencia de Durban, en la que las ONG reclaman el respeto por los acuerdos de Kyoto, ¿puede corregir esta tendencia o será un nuevo brindis al Sol?

No hay margen para el optimismo, ya que los participantes son, precisamente, los actores del capital. Como máximo, habrá dos o tres gobiernos, como los de Bolivia o Ecuador, que protestarán. Pasará como en la Cumbre de Copenhague, de donde surgió una declaración retórica de buenas intenciones que no atacaba a la raíz del problema. Reconocerán que no podemos superar ciertos umbrales aunque, para evitar el desastre que se deriva de la combustión, haya que apostar por las energías renovables.

La tercera vía promulgada por Tony Blair y que buena parte de la socialdemocracia europea siguió no pretendía reformas estructurales. ¿Ha sido esto un error?

La socialdemocracia y los Verdes han aceptado el neoliberalismo y sólo se han limitado a introducirle correcciones que no suponen, en absoluto, su transformación para impedir el desastre. La autolimitación ha sido nefasta. Lo hemos visto con Blair, Schröder, apandreu o Rodríguez Zapatero. Es una variante del neoliberalismo menos reaccionaria que la de la derecha, pro que no cambia en lo fundamental. De manera que es incapaz de resolver una crisis que, por parte de la izquierda más transformadora, ha de tener muy presente la ecología.

¿Puede ser que haya existido una interpretación perversa de conceptos como desarrollo sostenible o progreso?

En su inicio, la filosofía según la cual el desarrollo ha de ser respetuoso con el medio, era muy interesante. Pero pronto el Banco Mundial y los gobiernos conservadores se la apropiaron. Necesitamos una nueva perspectiva que conduzca hacia un cambio en el que se ponga en cuestión los fundamentos de un capitalismo que nos lleva al abismo.

De momento, parece que los planteamientos son más reactivos que propositivos…

Los movimientos de protesta y, entre ellos, la izquierda radical, son en su génesis expresiones de la indignación contra la dictadura del PUM (Partido Único de los Mercados), del sistema financiero y del cinismo del 1% que lo controla todo. Eso provoca un rechazo y, como resultado de esto, se ha abierto un espacio de debate y el ensayo de diversas alternativas sobre la base del bien común y del «otro mundo es posible».

Usted apuesta por el llamado ecosocialismo. ¿En qué consiste?

Es una forma de construir el socialismo actual en la cual, a diferencia de los modelos de los siglos XIX y XX, la ecología se convierte en una parte troncal. Comparte sus principios de la defensa de los servicios públicos, de la abolición de la deuda externa, de la nacionalización de la banca o de la creación de un servicio público de crédito, pero pone el acento en la dimensión ecológica de la actividad política, económica y social.

¿Qué lectura hace del marxismo?

Defiende que el socialismo y la ecología se necesitan para construir una sociedad más justa y duradera. Se trata, al fin y al cabo, de superar el viejo esquema por el cual la propiedad privada se sustituye por la propiedad colectiva con el fin de que las fuerzas productivas puedan desarrollarse con libertad. Para el ecosocialismo, además de las relaciones de producción, también han de cambiar las fuerzas productivas del capitalismo ya que, como se ha demostrado, son enemigas directas de la naturaleza.

¿Es una concepción más radical?

Sí, ya que significa modificar el paradigma de la civilización occidental moderna, cambiando el modelo de consumo y los sistemas energéticos de transporte. Esto quiere decir sustituir el gas, el petróleo, el carbón y la energía atómica por el viento, el Sol, el agua, la biomasa y otras energías limpias. Es necesario, por tanto, un nuevo sistema de producción, el cual ya no tendría como finalidad la creación de más mercancías de «obsolescencia inherente», como decía Herbert marcuse, sino bienes de uso en los que los aparatos duren muchos más años y se puedan arreglar.

En America Latina la izquierda ha empezado a construir a lo que se llama socialismo del siglo XXI. ¿Tiene algún tipo de analogía con su propuesta?

En efecto. En Venezuela, Bolivia, Ecuador o Perú, entre otros países, la izquierda está poniendo en práctica este intento de avanzar hacia un socialismo ecológico, contradiciendo esa tesis que, tras la caída del Muro, profesaba el fin del socialismo y de las utopías, y que Margaret Thatcher remachó con la frase «There is no alternative». En Europa, en cambio, todavía falta que se articulen políticamente estas experiencias de gobierno.

También es necesario un cambio cultura, ¿no cree?

Este cambio lo tendrá que decidir la población, a través de una discusión democrática, no un grupo de tecnócratas al que nadie ha elegido. Es un proceso que lleva años, en el cual se deberían tomar medidas que nos acerquen a este nuevo horizonte, como el impulso del transporte público, la creación de puestos de trabajo verdes o la supresión de la publicidad, que nos invita a no dejar de consumir. Una vez hayamos liberado a la gente de este fetichismo mercantilista, aparecerán las verdaderas necesidades sociales.

¿Tenemos que ir hacia una economía moral?

Lo decía William Thompson: «La economía y la producción han de estar al servicio de las necesidades humanas, no del mercado». Yo añadiría, sin embargo, con respeto por la naturaleza. Si conseguimos que arraigue esta nueva conciencia ecológica y social, podremos agrietar el capitalismo, que no es todopoderoso. Como apuntaba Gramsci, «tenemos que combinar el pesimismo de la razón con el optimismo de la voluntad». Y es que hay un potencial revolucionario con el cual se puede lograr un futuro mejor.

Domingo 18 de diciembre de 2011

jueves, 15 de diciembre de 2011

Querella criminal por prevaricación contra el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco

Jueves 15 de diciembre de 2011,

Hoy jueves día 15 de noviembre de 2011 Izquierda Anticapitalista presenta en la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo una querella criminal por prevaricación contra Eloy Velasco, juez de la Audiencia Nacional.

Los hechos a los que se refiere la querella se remontan al mes de septiembre del 2010, cuando el juez Velasco aceptó la solicitud de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, la Plataforma Democrática de Venezolanos en Madrid y el Frente Iberoamericano de Madrid de tomar declaración como testigo a Néstor González González- general retirado del ejército venezolano y solicitado por las autoridades venezolanas por la presunta comisión del delito de rebelión civil en el año 2002- en la causa que se seguía en su Juzgado de Instrucción nº 6 de la Audiencia Nacional para determinar la supuesta colaboración entre ETA y las FARC. El 8 de noviembre de 2010, días antes de la fecha prevista para la toma de declaración de Néstor González, la acusación particular ejercida por la Asociación Víctimas del Terrorismo presentó un escrito ante el juez Eloy Velasco en el que advertía que el Tribunal Supremo Venezolano había aprobado solicitar la extradición de Néstor González, refugiado en Costa Rica, a instancias de la Fiscalía General de la República de Venezuela por su participación en el golpe de Estado de 11 de abril de 2002 contra el entonces Presidente de la República de Venezuela, Hugo Chávez. La búsqueda de Néstor González también había sido incorporada en la base de datos de la Interpol. En dicho escrito la AVT solicitó al juez Velasco que, ante la posibilidad de que el testigo pudiera ser detenido en el Estado español si viajaba para prestar declaración, suspendiera su declaración testifical. Pocos días más tarde, y en clara contradicción con la legalidad vigente, el juez Eloy Velasco suspendió la declaración testifical para evitar que el testigo pudiera ser detenido y sometido a procedimiento de extradición.

La base de la querella interpuesta por Izquierda Anticapitalista es que en su función jurisdiccional el juez Eloy Velasco suspendió una diligencia de instrucción para evitar que Néstor González fuera detenido como resultado de una reclamación extradicional por rebelión civil existente en su contra a raíz del proceso penal que se sigue en Venezuela, país al cual el propio juez Velasco ha solicitado una serie de extradiciones en el marco del Tratado de Extradición entre Venezuela y España firmado el año 1990.

Desde Izquierda Anticapitalista consideramos que:

  • A pesar de que el juez Velasco ha solicitado en el pasado ayuda a la justicia venezolana, su propia ideología ha primado a la hora de evitar su colaboración en la detención de una persona perseguida por Venezuela, Néstor González, supuestamente implicada en una cuestión tan grave como el golpe de Estado en Venezuela.
  • Los hechos por los que se acusa a Néstor González son extremadamente graves y consideramos inadmisible que un juez, en este caso Eloy Velasco, le haya ayudado a evadir la acción de la justicia venezolana e internacional.
  • Consideramos inadmisible, asimismo, que un Juez de la Audiencia Nacional se permita decidir de manera unilateral sobre cuándo se debe cooperar con la Justicia de otros países y cuándo no. Es obvio que Eloy Velasco ha actuado al margen de la Ley.
  • El nulo rigor demostrado por Eloy Velasco a la hora de permitir la huida de Néstor González a sabiendas que éste estaba siendo perseguido por la Interpol, contrasta notablemente con el tozudo rigor con el que está persiguiendo a varios miembros del movimiento 15-M catalán por la manifestación realizada ante el Parlament catalán el día 15 de junio del 2011.
  • La actuación de Eloy Velasco es extremadamente peligrosa ya que, si bien se presenta como un Juez imparcial a pesar de estar vinculado directamente con el Partido Popular como su participación en el gobierno de Francisco Camps demuestra, persigue de manera injustificada a activistas sociales por un lado y por el otro no es capaz de cumplir con su obligación de facilitar la detención de un prófugo condenado por un delito extremadamente grave.

“Para cambiar las cosas es necesario trabajar día a día en las luchas”


Entrevista a Esther Vivas en inSurGente

¿Qué balance haces de los resultados de Izquierda Anticapitalista (IA) a las elecciones del 20N?

Creo que la campaña que hemos hecho ha sido buena, con un perfil combativo y planteando la necesidad de construir una alternativa de izquierdas al margen de los partidos tradicionales. Aunque está claro que los resultados, en número de votos, han sido muy modestos y muy por debajo de lo que sería necesario en un contexto como el actual. Y es que mucha gente prefiere todavía hacer “voto útil” hacia opciones como IU o abstenerse, ante la dificultad de una opción anticapitalista como la nuestra para obtener representación parlamentaria. Construir una alternativa anticapitalista es un proceso que llevará tiempo y perseverancia.

¿Qué sensación te produce que la llamada izquierda anticapitalista (en sus diversas organizaciones) se haya quedado nuevamente fuera del Parlamento?

Bueno, ¡ya contábamos con esto! Sabemos que las elecciones no son un terreno neutral y vienen determinadas por el dinero, la cobertura mediática y las palancas institucionales. Conseguir representación institucional siempre es difícil para las opciones que irrumpimos desde fuera del sistema de partidos. Abrir una brecha electoral y conseguir traer voces anticapitalistas a las instituciones para utilizarlas como altavoz no es cosa de un día, es una tarea a medio plazo.

Causó cierta polémica (comentarios, artículos…) en la prensa alternativa (Rebelión, Kaos, inSurGente, La Haine…) la posición de Izquierda Anticapitalista sobre lo ocurrido en Libia… ¿te sientes una “ni ni” como decían muchos comentarios?

No se trata de ser “ni ni” sino de tener posiciones políticas que sepan responder a realidades complejas y tener una visión dialéctica de la realidad, sin caer en posiciones “campistas” que simplifican las cosas. La situación en Libia se caracterizaba primero por contar con un gobierno dictatorial y despótico, aliado además desde la última década con Europa y los Estados Unidos, y que por lo tanto no puede defenderse. Segundo, una rebelión contra este régimen pero dirigida por sectores sin credibilidad y que no representan una alternativa de izquierdas. Tercero, una intervención por parte de la OTAN y el imperialismo con el objetivo de tutelar la caída del régimen y asegurarse el control del petróleo en la era post-Gadafi.

En un escenario así creo que lo correcto ha sido apoyar desde el principio la rebelión popular, pero sin apoyar a la dirección de las fuerzas rebeldes del Consejo Nacional de Transición, y oponerse a la intervención militar imperialista.
Y más en general me parece que hay que alentar las rebeliones contra todos los regímenes despóticos del mundo árabe y oponerse a los intentos, tanto de estos regímenes (o sus restos) como del imperialismo (por vía militar o diplomática), de ahogar estas protestas.

¿Ves diferencias sustanciales entre el PP y el PSOE?

En el terreno económico PP y PSOE defienden básicamente las mismas políticas que consisten en transferir el coste de la crisis a las y los trabajadores y gobernar en función de los intereses empresariales. La socialdemocracia, convertida al social-liberalismo, no tiene una agenda propia de salida a la crisis diferente de la derecha. Y aunque en temas como la familia, la sexualidad, etc. tienen posturas distintas, las posiciones del PSOE quedan supeditadas a los intereses empresariales.

La alternancia PP-PSOE, y conservadores y social-liberales que se da en los países europeos, se ha convertido en una alternancia similar a la de demócratas y republicanos en Estados Unidos. Al final, independientemente de quien gobierne, es el capital financiero el que manda. Otra cosa es que la base social de ambos partidos no es la misma y que la percepción social que se tiene de ellos tampoco.

¿No tienes la sensación de que la actividad militante y reivindicativa de organizaciones como IA, luego la canalizan electoralmente otros?

Es verdad que en las elecciones opciones como IU, ICV y otras tienen una fortaleza que no se corresponde con su implantación social real ni, aún menos, con su participación e implicación en las luchas. Y, al revés, los colectivos más activos en las luchas sociales tenemos poca incidencia electoral. Justamente se trata de intentar romper esta situación y no dejar que la representación electoral sea monopolio de fuerzas con pocos vínculos con las luchas o con vínculos muy supra-estructurales.

IA tuvo negociaciones con IU para acudir juntos a las elecciones, ¿por qué fracasaron?

IU convocó a varias fuerzas para hablar del 20N. Nosotros sacamos una “carta abierta” dirigida también al conjunto de la izquierda. Defendíamos que cualquier candidatura unitaria a la izquierda del PSOE debía basarse en un proyecto con un programa anticapitalista, estuviera vinculado a las luchas sociales, dispuesto a utilizar su presencia parlamentaria en beneficio de las movilizaciones, hiciera un balance crítico de su paso por gobiernos con el PSOE (como el caso del tripartito catalán) y, sobre todo, que estuviera representado y encarnado por activistas, trabajador@s, parad@s y no por políticos profesionales. Una propuesta que representara un proyecto nuevo, al margen del sistema de partidos convencionales y con voluntad de ser una alternativa. Y vimos como IU tenía otro planteamiento distinto al nuestro. Consideramos que con fuerzas como IU hay que trabajar en lo que estamos de acuerdo, en actividades sociales donde coincidamos, etc., pero está claro que tenemos proyectos de izquierda distintos.

¿Qué le dirías a las personas que han votado a IU, e incluso al PSOE o Equo, pensando que lo hacen a organizaciones revolucionarias o de izquierdas?

Les diría que para cambiar las cosas es necesario trabajar día a día en las luchas y que no cambiaremos este mundo desde las instituciones, como bien demuestra la historia. Y que llegados a unas elecciones es mejor apoyar a organizaciones políticas que tienen su centro de gravedad en la calle y no en las instituciones. Apoyar a organizaciones que no pactarán con el social-liberalismo como otras de las que tu citas han hecho o están dispuestos a hacer como demuestran sus organizaciones hermanas. Pero es comprensible que mucha gente vote a estas formaciones, aunque espero que la experiencia práctica pueda ir rompiendo espejismos. No tenemos que culpabilizar a nadie por apoyar a estas fuerzas, sino persuadirles de la necesidad de hacer otra apuesta.

¿Cómo es posible que gobiernos autonómicos que han tomado decisiones tan impopulares, el 20N hayan subido en número de votos?

No hay que perder de vista que la mayor parte de la ciudadanía no ha votado ni al PP en el Estado español ni a CiU en Catalunya, y aún menos han votado los recortes. El PP consiguió el apoyo del 30,27% del electorado del Estado, pero esto es sólo un 0,97% superior al que consiguió en el 2008. Y en Catalunya, CiU ganó las elecciones con tan solo el apoyo de un 18,8% del censo electoral. Hay que recordar estas cifras frente al mantra que dice que los resultados electorales legitiman sus políticas de recortes. Sin por eso dejar de constatar que la derecha posee una base social significativa y sólida.

¿Será posible algún día un gran Frente de Izquierdas que aglutine a todas las personas que cuestionan de arriba a abajo el capitalismo?¿Se trabaja para ello?

Tenemos el reto colectivo de construir una alternativa anticapitalista, lo más fuerte y amplia posible, que pueda llegar a tener incidencia social. No hay atajos para ello y queda mucho trecho por recorrer, pero creo que es una voluntad compartida entre muchas organizaciones, colectivos y personas.

Josep Maria Antentas y Esther Vivas: "Más capitalismo verde"

Un balance de la cumbre del clima en Durban

Josep Maria Antentas y Esther Vivas | Público

Se salva a los mercados y no al clima. Así podríamos resumir lo que constata la recién terminada 17ª Conferencia de las Partes (COP 17) de Naciones Unidas sobre Cambio Climático en Durban, Sudáfrica, celebrada del 28 de noviembre al 10 de diciembre. La rápida respuesta que gobiernos e instituciones internacionales dieron al estallido de la crisis económica en 2008 rescatando a bancos privados con dinero público contrasta con el inmovilismo frente al cambio climático. Aunque esto no nos debería de sorprender. Tanto en un caso como en otro ganan los mismos: los mercados y sus gobiernos cómplices.

En la cumbre del clima de Durban dos han sido los temas centrales: el futuro del Protocolo de Kioto, que concluye en 2012, y la capacidad para establecer mecanismos en la reducción de emisiones; y la puesta en marcha del Fondo Verde para el Clima, aprobado en la anterior cumbre de Cancún, con el objetivo teórico de apoyar a los países pobres en la mitigación y la adaptación al cambio climático.

Tras Durban podemos afirmar que un segundo periodo del Protocolo de Kioto ha quedado vacío de contenido: se pospone una acción real hasta el 2020 y se rechaza cualquier tipo de instrumento que obligue a la reducción de emisiones. Así lo han querido los representantes de los países más contaminantes con Estados Unidos a la cabeza quienes abogaban por un acuerdo de reducciones voluntarias y rechazan cualquier tipo de mecanismo vinculante. Pero si el Protocolo de Kioto ya era insuficiente, y de aplicarse evitaba sólo 0,1º centígrados de calentamiento global, ahora vamos de mal en peor.

Entorno al Fondo Verde para el Clima, si en un primer momento los países ricos se comprometieron a aportar 30 mil millones de dólares en 2012 y 100 mil millones anuales para 2020, cifras que de todos modos se consideran insuficientes, la procedencia de estos fondos públicos ha quedado por determinar mientras se abren las puertas a la inversión privada y a la gestión del Banco Mundial. Como han señalado organizaciones sociales se trata de una estrategia para “convertir el Fondo Verde para el Clima en un Fondo Empresarial Codicioso”. Una vez más se pretende hacer negocio con el clima y la contaminación medioambiental.

Otro ejemplo de esta mercantilización del clima ha sido el aval de la ONU a la captura y almacenamiento de CO2 como Mecanismo de Desarrollo Limpio, que no pretende reducir las emisiones y que agudizaría la crisis ambiental, especialmente en los países del Sur candidatos a futuros cementerios de CO2.

Así, los resultados de la cumbre apuntan a más capitalismo verde. Como indicaba el activista e intelectual surafricano Patrick Bond: “La tendencia a mercantilizar la naturaleza se ha convertido en el punto de vista filosófico dominante en la gobernanza mundial medioambiental”. En Durban se repite el guión de cumbres anteriores como la de Cancún 2010, Copenhague 2009… donde los intereses de las grandes multinacionales, de las instituciones internacionales y de las élites financieras, tanto del Norte como del Sur, se anteponen a las necesidades colectivas de la gente y al futuro del planeta. En Durban estaba en juego nuestro futuro pero también nuestro presente. Los estragos del cambio climático están teniendo ya sus efectos: liberación de millones de toneladas de metano del Ártico, un gas 20 veces más potente que el CO2 desde el punto de vista del calentamiento atmosférico; derretimiento de los glaciares y de los mantos de hielo que aumenta el nivel del mar. Unos efectos que incrementan el número de migraciones forzadas. Si en 1995 había alrededor de 25 millones de migrantes climáticos, hoy esta cifra se ha doblado, 50 millones, y en el 2050 ésta podría ascender a entre 200 y mil millones de desplazados.

Todo apunta a que nos dirigimos hacia un calentamiento global descontrolado superior a los 2º, y que podría rondar los 4º, para finales de siglo, lo que desencadenaría muy probablemente, según los científicos, impactos inmanejables, como la subida de varios metros del nivel del mar. No podemos esperar hasta el año 2020 para empezar a tomar medidas reales.

Pero frente a la falta de voluntad política para acabar con el cambio climático, las resistencias no callan. Y emulando a Occupy Wall Street y a la ola de indignación que recorre Europa y el mundo, varios activistas y movimientos sociales se han encontrado diariamente en un foro a pocos metros del centro de convenciones oficiales bajo el lema ‘Occupy COP17’. Este punto de encuentro ha reunido desde mujeres campesinas que luchan por sus derechos hasta representantes oficiales de pequeños estados isleños como Las Seychelles, Granada o Nauru amenazados por una subida inminente del nivel del mar, pasando por activistas contra la deuda externa que reclaman el reconocimiento y la restitución de una deuda ecológica del Norte respecto al Sur.

El movimiento por la justicia climática señala como frente a la mercantilización de la naturaleza y los bienes comunes es necesario anteponer nuestras vidas y el planeta. El capitalismo se ha demostrado incapaz de dar respuesta al callejón sin salida al que su lógica productivista, cortoplacista y depredadora nos ha conducido. Si no queremos que el clima cambie hay que cambiar radicalmente este sistema. Pero los resultados de Durban apuntan en otra dirección. El reconocido activista ecologista nigeriano Nnimmo Bassey lo dejaba bien claro con estas palabras: “Esta cumbre ha amplificado el apartheid climático, donde el 1% más rico del mundo ha decidido que es aceptable sacrificar al 99% restante”.

La Rusia de los indignados. “¡No os hemos votado!”

Miércoles 14 de diciembre de 2011,

Carine Clément, Desde Moscú para Viento sur

Las elecciones en Rusia han transcurrido, como de costumbre, con falsificaciones masivas y la presión de los poderes para asegurar la victoria del partido del poder “Rusia Unida”. Lo que cambia es la amplitud de las protestas contra estas falsificaciones.

Esta vez, una gran parte de la población se levanta para testimoniar: “¡No os hemos votado!”. Las cifras significan pocas cosas (recordémoslas sin embargo: 49,54% para Rusia Unida, 19,16% el Partido Comunista, 13,22% “Rusia Justa y 11,66 % el partido nacionalista demagógico Jirinovski). El partido del poder ha perdido por tanto la mayoría constitucional en la Duma y se ha quedado por debajo el 50%. Pero para una gran parte de los comentaristas, esta cifra sobrevalora el real resultado de “Rusia Unida” entre un 10% y un 15%. Y, de todas formas, es un resultado puramente “dibujado”, como dicen los rusos. Resulta de una concesión hecha al descontento creciente de una gran parte de la población hacia el “partido de los estafadores y los ladrones” (así es corrientemente designado el partido en el poder, fórmula inventada y popularizada por el blogger Alexei Nabalny).

En efecto, al comienzo de la campaña, los gobernadores regionales recibían del Centro federal objetivos del orden del 60% al 70% de los votos. Sin suerte, este gesto del príncipe no ha bastado para calmar la cólera, al contrario. Desde el día siguiente a las elecciones, casi diez mil personas se manifestaban en la calle en Moscú, un poco menos en San Petersburgo. Más de 300 personas han sido detenidas en Moscú, alrededor de 200 en San Petersburgo. Lo que no ha impedido a las movilizaciones continuar los días siguientes, así como las detenciones. ¿Cómo explicar este cambio radical de la situación, cuando la mayoría de los electores, desde hace un cierto tiempo, se había habituado a que sus votos no valieran mucho? ¿Quiénes son esas gentes que salen a la calle a pesar de la amenaza de las detenciones?

La movilización resulta en gran parte de la impopularidad creciente del partido en el poder, no solo debido a su política antisocial, sino también y sobre todo a causa de la arrogancia de sus representantes, de su desprecio por los ciudadanos de a pie, de su corrupción y su afán de ganancias. El eslogan más popular durante la campaña electoral, en todo caso entre quienes se interesan aunque sea un poco por la política, era “¡Vota por cualquier partido, salvo por el de los estafadores y los ladrones!” Y había nacido la esperanza de llegar a burlarse de ese partido de burócratas y dirigentes presuntuosos que se creen que todo les está permitido.

Mucho más que en precedentes elecciones, simples ciudadanos se han movilizado para ser observadores en las elecciones, por uno u otro partido de oposición o incluso de forma independiente (una campaña para incitar a la gente a presentarse como voluntaria para ser observadora ha sido realizada, entre otros, por la asociación GOLOS, denunciada por el poder de estar a sueldo de “potencias extranjeras”). Y una cosa es oír hablar vagamente de fraudes y otra es verse expulsar manu militari de un local de votación porque se molesta demasiado, asistir a rellenos de urnas, ver llegar autobuses enteros de votantes estrechamente disciplinados, tener un protocolo en las manos y encontrar cifras completamente diferentes en la página oficial de la Comisión Electoral central o regional. Internet rebosa de videos y de testimonios indignados publicados por estos observadores. ¡Es personal, es alucinante, choca!

Muchos de esos observadores han salido a la calle, muchos de sus amigos, colegas, parientes. Luego todo los que se activan en las redes sociales de la Red, y todos los, decepcionados que esperaban una derrota más clara de Rusia Unida.

Muchos jóvenes, mucho más irreverentes que sus mayores, que traen otro estilo, otra relación con la autoridad.

Muchísima gente nueva, que hasta ahora jamás había puesto los pies en una manifestación. Y algunos de estos novicios se han encontrado desde la primera vez detenidos, esperando un juicio hasta 48 horas, en comisarías absolutamente sin preparar para tanta gente, amontonados unos sobre otros, sin alimentación. ¡Para finalmente verse condenados a penas que llegan hasta los 15 días de detención! Y bien, si se juzgan los testimonios que salen de las paredes de la prisión, en lugar de estar intimidados y confesar sus culpas, estos “novicios” emprenden huelgas de hambre y se radicalizan. O bien vuelven a manifestarse una vez liberados.

Indignación ante las falsificaciones, la brutalidad y el cinismo en los fraudes, cólera por haber sido desprovistos de su voz, solidaridad con quienes han sido injustamente detenidos por sencillamente haber querido manifestar pacíficamente su rechazo a unas elecciones trucadas –estos son los ingredientes de la movilización que crece como una bola de nieve.

Con, además, el apoyo de creadores de opinión populares en su terreno. Entre ellos, hay de todo: periodistas, cantantes y otros artistas, cronistas (incluidos algunos cronistas mundanos). Es también un signo, cuando esa gente se pone abiertamente a criticar: ¿la protesta en la calle se convertirá en una moda? (Hasta ahora era el monopolio de los “fracasados” y de los “idiotas”).

Tanto más cuanto que, por una vez (no había ocurrido desde la Perestroika), los acontecimientos ocurren en la capital, es Moscú, la burguesa culta, la intelectual, la privilegiada, la que da ejemplo. Los medios no pueden ignorar manifestaciones tan masivas en Moscú (a parte de las dos cadenas de televisión oficiales), el país entero sigue atentamente lo que allí ocurre, y sintoniza. El 10 de diciembre, una jornada nacional de protesta contra las falsificaciones fue preparada un poco por todo el país.

Los partidos de oposición parlamentarios juegan un segundo papel, cogen el tren en marcha (y así y todo, no todos y no en todas las regiones, y en medida mayor o menor). La gente se organiza en primer lugar por si misma, a través de las redes sociales y la Red. O bien utiliza acontecimientos organizados por los partidos políticos, pero para apropiarse completamente de ellos.

Una palabra en particular sobre la derecha liberal (los Boris Nemtsov, Ilia Iachin o Garry Kasparov presentados por la prensa francesa como figuras representativas de la movilización). En primer lugar, la movilización es completamente espontánea y “desde abajo”, sin dirigentes reconocidos, y sobre todo sin filiación partidaria, ni hacia los partidos de la oposición oficial (representados en la Duma federal), ni hacia los de la oposición no oficial. Todo lo más se puede hablar de simpatías por tal o cual líder de opinión (particularmente el blogger ya citado, Alexei Navalny). Pero ningún partido, ningún movimiento –político o social- puede presumir de organizar el movimiento de cólera actual, aún menos de representarlo. Sin embargo es justamente lo que se dedican a hacer, en primer lugar, las vedettes del show-político citadas más arriba, que dirigen organizaciones anti Putin del tipo “Otra Rusia” o Solidarnost. Hacer de ellas las puntas de lanza de la movilización actual en Rusia, es engañar mucho, es confundir la “revolución naranja” de Ukrania con el movimiento de revuelta espontáneo, en gran medida autoorganizado y que rechaza toda instrumentalización (¡esta gente quiere justamente reapropiarse de su voz!) que se desarrolla actualmente en Rusia. Como prueba de la piedad democrática de Nemtsov, por ejemplo, basta con citar el último escándalo hasta ahora: en la noche del 8 al 9 de diciembre, a espaldas de los organizadores oficiales, Nemtsov se ha puesto de acuerdo con el alcalde de Moscú para desplazar la gran concentración del 10 de diciembre de la Plaza de la Revolución a la Plaza “Bolotnaia” (que lleva bien su nombre “pantanosa”)- sin consultar a ninguna de las personas clave de la movilización, y cuando uno de los organizadores oficiales, Serguei Udaltsov (Frente de izquierdas) yacía en una cama de hospital tras una huelga de hambre emprendida en prisión, y una persona faro simbólico para el movimiento, Alexei Navalny, cumplía con su pena de 15 días de cárcel, como consecuencia de la manifestación del 5 de diciembre en Moscú.

Otra característica a señalar: la presencia más bien tímida de los movimientos sociales y a fortiori de los sindicatos. Aquí juega el temor de comprometerse en un combate demasiado claramente político y la falta de flexibilidad de estos movimientos para abrirse a causas no directamente ligadas a su objetivo principal de lucha. Pero si los movimientos sociales participan poco como tales, la mayor parte de sus militantes están sobre el terreno. En Moscú, por ejemplo, Evgenia Tchirikova, dirigente del movimiento de defensa del bosque de Khimki (barriada de Moscú) y estrella en ascenso de los nuevos movimientos sociales, forma parte de las figuras emblemáticas de la movilización en la capital.

En definitiva, es una atmósfera de democracia de calle la que se pone en pie, bastante extraña a la Rusia postsoviética de hasta ahora. El despertar de quienes se niegan a dejarse manipular calladamente. Un gran test para la durabilidad y las perspectivas de este movimiento tendrá lugar mañana, 10 de diciembre, en la jornada nacional de protesta.

9/12/2011

http://www.npa2009.org/content/la-r...

Traducción: Faustino Eguberri para VIENTO SUR

domingo, 11 de diciembre de 2011

COMUNICADO MOVIMIENTO 15M DE GRANADA.

UN AÑO MÁS, UNA VECINA MENOS

STOPDESAHUCIOS – 14D

Paremos los desahucios

El próximo miércoles 14 de diciembre está programado el TERCER INTENTO de desahucio de una de las dos viviendas que quedan habitadas en la Casa del Aire (nombre histórico del edificio situado en C/Beteta 20 y C/Zenete 7). Después que la solidaridad de más de un centenar de personas consiguiera parar las dos primeras tentativas de desahuciar a esta vecina (22 de junio y 6 de octubre), y habiéndose denegado la petición del Cuerpo Nacional de Policía consistente en realizar el desahucio sin previo aviso, ahora los JUZGADOS amenazan con materializar el desalojo, incluyendo una nueva condición: en caso de que no haya una entrega voluntaria de las llaves, es la propia vecina la que ha de acarrear con las costas de su desalojo. Frente a este atropello de los derechos y dignidad de la vecina afectada, desde el 15M sólo podemos dar una respuesta organizada, conjunta y no violenta que muestre que no nos vamos a amedrentar ante las coacciones y amenazas por parte de los diferentes poderes públicos.

MARTES 13/12 a las 23h, ACAMPADA en la Casa del Aire (c/ Zenete 7)

MIÉRCOLES 14/12 a las 7h, desayuno popular

…y a las 8h, desahucio

Hace ya seis años que la inmobiliaria EDIVARA-VARASOL-DRUGA compró esta casa de vecinos con la idea de echarlos a todos a la calle y poder especular con el inmueble. El negocio que plantearon era redondo: consiguen que un técnico del Área de Urbanismo del Ayuntamiento (Valentín Rivas) firme un informe de ruina (¡SIN VISITAR LA CASA!), los vecinos se van sin indemnización alguna, derriban el edificio y construyen en él apartamentos de lujo (publicitados en su web desde hace años). Pero a los especuladores que se amparan tras los diferentes nombres de su empresa les apareció una piedra en el camino: un grupo de vecin@s que se informó y comenzó a pelear por su dignidad pisoteada y para conseguir que su casa no fuera derribada.

A lo largo de todos estos años de lucha, los vecinos se han implicado dejando su tiempo, esfuerzo y dinero en arreglar la casa para que no se les viniese abajo, ante la pasividad de la inmobiliaria que sólo pretendía que el estado de la vivienda empeorase para poder volver a intentar declarar la ruina del inmueble que el ayuntamiento, gracias a un informe de contrarruina presentado por los vecinos, había negado anteriormente. Las vecinas también han invertido en defenderse de los envites judiciales de la propiedad y en denunciar los atropellos de una especulación que está destrozando completamente el Albayzín y tantos otros lugares.

En enero de 2010, la policía desalojó por orden judicial a los vecinos que no tenían contrato, dejando la casa en una situación de indefensión total. Sin meternos demasiado en el atropello que sufrieron los desalojados (como el robo de sus pertenencias), la situación de los dos vecinos que quedaban en la casa se hizo insostenible: tenían un guarda de seguridad 24 horas que les decía quién podía entrar en sus casas y cuándo, no tenían llave de su propio portal ni podían acceder a uno de los patios (entre otros espacios) porque la empresa así lo quería (el paso a este patio sigue cerrado a día de hoy). Las denuncias que se interpusieron a causa de estos y otros atropellos sufridos nunca prosperaron porque al poder judicial no le interesa ver a sus amigos de las grandes empresas inmobiliarias salpicados por un escándalo de mobbing como éste.

En cuanto al papel del Ayuntamiento, después de todos estos años y pese a los eternos plazos administrativos, visitas infructuosas e instancias perdidas en algún cajón, hemos conseguido que la Gerencia de Urbanismo decrete el “incumplimiento del deber de mantenimiento” (ante el abandono flagrante de los deberes de mantenimiento de la casa por parte de la inmobiliaria). En este momento, la inmobiliaria, a través de un contencioso-administrativo contra el Ayuntamiento que puede durar más de cinco años, ha conseguido paralizar un proceso que iba a obligarles (mediante la “venta forzosa”) a deshacerse del edificio. Es decir, que l@s vecin@s de la Casa del Aire han intentado por todos los medios, incluidos los administrativos, que Edivara mantuviese el buen estado de la casa y la rehabilitara, y han obtenido seis años de abandono total por parte de la administración y los propietarios, y un vecino que este miércoles (si no lo impedimos) se quedará sólo en un inmueble de doce viviendas cada vez más deteriorado.

Ante esta injusticia, desde el movimiento 15M no podemos hacer otra cosa que plantar cara y parar este desahucio. Para ello, emplearemos nuestras armas, las armas del pueblo: LA UNIÓN Y LA SOLIDARIDAD. Sabemos que muchas otras personas y colectivos de la ciudad y también de fuera están mirándonos y mirando a la policía y al juez que intentarán ejecutar el desahucio. Esas miradas nos hacen aun más fuertes.

Por todo esto, el movimiento 15M ha decidido convocar una acampada en la Casa del Aire la noche del martes 13 de diciembre al miércoles 14 y un desayuno popular a las 7h de ese mismo miércoles, con el que nos concentraremos en la puerta de entrada del inmueble para denunciar el atropello flagrante a los derechos de los arrendatarios, la injusticia estructural que lleva a dejar en la calle a cientos de miles de personas a través de los desahucios y desalojos y para mostrar nuestro apoyo tanto a la vecina que pretenden desalojar como al vecino que quedaría en la casa.

Invitamos a tod@s l@s vecinas de Granada a acudir, solidarizarse y parar este desahucio y todos los que vengan en nuestra ciudad.

El Banco central europeo (BCE): ¿Un nuevo dictador en Europa?

Sábado 10 de diciembre de 2011,

Yves Julien

El Banco Central Europeo (BCE) es el organismo encargado de llevar a cabo la política monetaria de la zona Euro (creación y destrucción de monedas/billetes, fijación de los tipos de interés, suministro de reservas) |1|. Tiene un consejo de gobierno constituido por 23 miembros |2|, de los cuales 6 conforman el consejo ejecutivo, nombrados por mayoría cualificada por el Consejo Europeo (formado por las Jefaturas de Estado y de Gobierno de los Estados miembros de la Unión Europea y el Presidente de la Comisión), y los otros son los gobernadores de los bancos centrales de los 17 países miembros de la zona euro (Alemania, Austria, Bélgica, Chipre, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, España, Finlandia, Francia, Grecia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Malta, Países Bajos y Portugal). Estos gobernadores son nombrados por las personas que encabezan los gobiernos de sus respectivos países. Por lo tanto, NINGUNO de los miembros del consejo de gobierno del BCE tiene un cargo electo.

Esta configuración, según dictan sus estatutos, garantiza la independencia del banco. ¿Independencia de quien? De los Estados. Desde la creación del primer banco central (en el siglo XVII), se ha debatido sobre la conveniencia de que los bancos centrales fueran independientes de los gobiernos. ¿Porque? Porque en el pasado algunos gobiernos han sido propensos a crear moneda para financiarse, provocando una importante inflación. Es por esta razón que los mismos estatutos del BCE le prohíben prestar dinero a estados. Pero cuando los bancos centrales han sido independientes del Estado, este perdió su soberanía sobre su moneda, que pudo ser cooptada por bancos privados. Y no hay que perder de vista que la moneda es un bien común, de todas las personas, y por lo tanto de interés público.

El caso más famoso de hiperinflación es el de la republica de Weimar (Alemania), que llego a superar el 26.000.000.000% solamente en el año 1923. Esta hiperinflación es reconocida como uno de los factores que llevaron a los nazis al poder. Es en parte en reacción a esta experiencia histórica traumática que el BCE apunta a un euro fuerte, con una inflación controlada al máximo. Y esas características son las que han propiciado el fuerte endeudamiento de la zona periférica de la Unión Europea (UE), ya que antes de entrar en el euro sus exportaciones se realizaban hacia países fuera de la UE, mientras que para los países del centro éstas se realizaban dentro de la UE. Y si recordamos, nada más nacer el euro, éste empezó a subir respecto a las demás monedas, lo que dificultó la exportación fuera de la zona euro, en detrimento de la periferia, que tuvieron que endeudarse con los países del centro para poder pagar sus importaciones.

Para conseguir un euro fuerte y sin inflación, el BCE lleva a cabo una política monetaria de creación y destrucción de moneda, según lo exija la coyuntura económica del momento. En sus informes, muy técnicos, el BCE describe la situación en la zona euro, y presenta las medidas que ha tomado. Pero además, siempre incluye un apartado final sobre recomendaciones a los gobiernos de los países de la zona euro. Estas recomendaciones son mucho menos técnicas, y con un claro corte neoliberal (disminución del gasto público – sanidad, educación, jubilaciones, paro; reforma del derecho laboral; desaparición del salario mínimo; subidas del IVA, etc). Si bien esta orientación neoliberal siempre ha existido en el BCE, su influencia se ha ido aumentando a media que se profundizaba la crisis económica.

Con esta crisis económica, muchos bancos se han visto en dificultad, ya que la falta de confianza entre unos y otros (por si detenían activos tóxicos – hipotecas “subprime”) provocó una falta de liquidez. Para no asfixiar la economía productiva, altamente dependiente de la posibilidad de financiarse mediante préstamos, los estados han financiado los bancos (con préstamos, compra de activos tóxicos, avales y garantías sin contrapartida ninguna), endeudándose para salvar la economía (a través del rescate a los bancos). Pero puesto que el BCE no puede prestar dinero a los estados, este presta dinero a los bancos (a un interés del 1 al 1.5%), quienes a su vez, lo prestan a los estados (a un interés del 4-5% o más). Es decir, muchos bancos se están forrando con este negocio.

Pero como muchos bancos siguen en apuros (por culpa de préstamos consentidos a particulares, empresas y estados que es más que probable que nunca sean reembolsados), la política actual del BCE es de prestar a los bancos EL DINERO QUE NECESITEN mientras ellos le depositen las garantías suficientes. En cuanto a estas garantías, sirven las ofrecidas por los Estados como medida de rescate a los bancos, pero también cualquier activo, por tóxico que sea. Y mientras estos activos sigan remunerados, estos beneficios son para los bancos, ya que oficialmente estos activos siguen siendo propiedad de los bancos. Por lo tanto, el BCE presta a los bancos lo que pidan, a cambio de garantías públicas (que acabarán transformándose en deuda pública), o privadas sin valor. Así, los bancos no corren ningún riesgo al pedir cualquier cantidad de dinero. Es decir, a los agentes que provocaron la crisis por su codicia, ¡se les da acceso libre a financiación! Y como las mismas causas suelen producir los mismos efectos, todas las condiciones están reunidas para una nueva crisis, mayor que la anterior, ya que el volumen de especulación se ha incrementado…

Las consecuencias para los Estados son dobles, por un lado se ha disparado su deuda soberana, razón por la cual se les hace cada vez más difícil financiarse, y por el otro lado los bancos disponen de dinero casi ilimitado para especular con esas deudas soberanas, lo que dificulta aún más las posibilidades de financiamiento. Y aquí es donde vuelven a aparecer las recomendaciones del BCE: ya que con un cese en el pago de su deuda soberana por parte de algunos Estados, significaría un debilitamiento del euro. Por esta razón, el BCE ha empezado a comprar deuda soberana griega o italiana por ejemplo (en contradicción con sus estatutos). A cambio de que se apliquen sus recomendaciones. Y todas estas medidas tienen un único fin: que los Estados muy endeudados sigan pagando sin falta sus deudas. ¿En beneficio de quién? De los acreedores de esas deudas, es decir bancos y fondos de inversión. Y es así como una institución totalmente ajena al control democrático, falsamente presentada como meramente técnica, al servicio de las finanzas, se ha vuelto el órgano de decisión en varios Estados. De hecho, no es casualidad que los nuevos jefes del gobierno italiano y griego son altos cargos de las finanzas europeas, después de que la especulación sobre las deudas públicas de estos Estados hayan acabado con los gobiernos anteriores.

Ya que el BCE se ha puesto a hacer política, es legítimo que se ponga bajo control ciudadano, para evitar que se convierta en el nuevo dictador de Europa. Por supuesto, esto no es suficiente para recuperar nuestra soberanía. Por ello, los Estados tienen que tener el control de su moneda, y otras medidas de control de las finanzas son necesarias, como la nacionalización de la banca, la abolición de paraísos fiscales, la tasación de las transacciones financieras y las auditorias de todas las deudas, resultan imprescindibles.

Yves Julien (Patas Arriba, Comisión de Economía del 15M de Benimaclet – Valencia)

Notas

|1| Este articulo ha sido inspirado por la serie de reportajes sobre el BCE del programa “Là-bas si j’y suis” de la radio pública francés FRANCE INTER entre el 3 y el 7 de octubre 2011. Estos programas están disponibles para su escucha (en francés) en http://www.la-bas.org.

|2| El hecho de que todos los sustantivos estén en masculino plural no se debe a una norma gramatical discriminatoria, sino a que TODAS ESTAS PERSONAS SON VARONES.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Gran Bretaña: una huelga histórica.


La huelga del 30 de noviembre por la defensa de las jubilaciones del sector público fue la más importante desde hace una generación.

El 30 de noviembre, más de 2,5 millones de trabajadores hicieron huelga, en la sanidad, los servicios municipales, los ministerios, lo nunca visto desde hace mucho tiempo. 30 sindicatos estuvieron implicados, de los cuales los tres más grandes, Unite, Unison y el GMB. Muchas manifestaciones tuvieron lugar en numerosas ciudades, incluso en aquellas en las que ya no había habido ninguna desde la guerra de Iraq en 2003. Más de 50 000 personas se manifestaron en Londres y más de 15 000 en Belfast. Hubo incluso una manifestación de 100 personas en Lerwick en el archipiélago de Shetland. Para la inmensa mayoría de los participantes, se trataba de su primera huelga. Dos cada tres escuelas dos estaban cerradas, así como los museos y los tribunales, mientras que las operaciones no urgentes, en numerosos hospitales, fueron anuladas.

La huelga ha sido un gran éxito no solamente por su amplitud, también porque todo el mundo sabía que no se trataba solamente de las jubilaciones sino también de la defensa de los servicios públicos y en definitiva de saber quien tiene que pagar la crisis. La huelga también ha levantado la cuestión general de las jubilaciones. El gobierno dirigido por los conservadores ha declarado que era injusto que los trabajadores del sector público recibiesen una mejor pensión que los del privado. Pero no ha dicho nada sobre los salarios anuales de varios millones de libras que reciben los banqueros como por ejemplo los de los directores de Barclays y Royal Bank of Scotland. Más de 2,5 millones de jubilados viven por debajo del umbral de pobreza con 178 libras por semana (832 euros mensuales). La pobreza de los jubilados en Gran Bretaña es una de las peores de Europa, justo después de la de Chipre, Letonia y Estonia.

La huelga del 30 tardó en llegar. En cuanto salió elegido, el gobierno dirigido por los conservadores anunció que llevaría a cabo una guerra contra los servicios públicos, y contra la remuneración y la condición de vida de los trabajadores en general. Aunque el TUC (unión de los sindicatos) decidiera en septiembre de 2010 organizar una manifestación nacional de 500 000 personas el 26 de marzo. A pesar del éxito importante de esa manifestación, las direcciones de los tres grandes sindicatos y del TUC fueron reticentes a seguir con la movilización. Es sólo después del inmenso éxito de la huelga del 30 de junio, organizada por los sindicatos de enseñanza (UCU, NASWUT y NUT) y por el sindicato de los funcionarios PCS, que todos los demás sindicatos y el TUC decidieron finalmente convocar a sus afiliados a la huelga.

Los dirigentes de la mayoría de los sindicatos han sido empujados a organizar la huelga bajo la presión de sus miembros y porque ya no tenían mucha más elección. El gobierno ha dado largas a las negociaciones desde el principio del año sin ninguna concesión e incluso llegó a imponer modificaciones sin negociación alguna a los regímenes de jubilación, como por ejemplo el retraso a los 67 años para que los jóvenes trabajadores puedan jubilarse.

El gobierno acelera los ataques contra la clase trabajadora en un momento en el que la recesión está a punto de transformarse en depresión: los trabajadores de sector público, que padecen ya una congelación de los salarios de dos años, verán a continuación todo aumento techado en 1%. Con una inflación del 5,4%, esto corresponde a una bajada del 20% de los salarios en 4 años. El gobierno ha anunciado la supresión de 710 000 puestos de funcionarios que se añaden a la cifra de 400 000 anunciada el año pasado. Osborne, el ministro de las Finanzas, ha declarado que haría “todo lo necesario” para reducir el déficit. Esto significa rebajas fiscales para los ricos y dinero recuperado en los bolsillos de todos los demás.

La huelga del 30 de noviembre sólo puede ser un principio en la resistencia contra el gobierno. El movimiento debe ser intensificado con fechas previstas para principio del año que viene en relación con los trabajadores del privado. Los jóvenes y los estudiantes deben implicarse ya que el retraso de la edad de jubilación tendrá un efecto inmediato de cara al paro de los jóvenes de menos de 25 años que alcanza actualmente un nivel record con un 20%. La huelga del miércoles 30 en Gran Bretaña fue seguida al día siguiente de una huelga general de un día en Grecia y el viernes de una jornada sindical unitaria en Bélgica. La solidaridad a escala europea y la acción común es más que nunca necesaria para hacer retroceder el asalto neoliberal a todas nuestras conquistas de la posguerra.